A la sombra del Cónclave
En una ocasión el poeta Luis Rosales, hablándome del magnum opus que se traía entre manos sobre Cervantes, me dijo que si los españoles somos “hijos de algo” es gracias a Cervantes y a Velázquez. Esa lección me marcaría para siempre y fue con ocasión del centenario de Velázquez cuando tuve ocasión de desarrollarla, a la vez que de algún modo y salvadas las distancias intentaba pagar la deuda contraída con Italia, donde tuve la suerte de pasar como ellos dos unos años inolvidables de ventura y provecho. Aún residía en la Urbe cuando hablé en verso de don Miguel, y el cuadro no estaría completo si no hablara ahora en prosa de don Diego.
Comienza el Cónclave. Por suerte Zapatero no está en Roma.
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Antes Ortega y Gasset ya había señalado en sus "Meditaciones del Quijote" a Cervantes y Velázquez como cumbres españolas. Allí escribió aquello de "si algún día viniera alguien y nos descubriera el perfil del estilo de Cervantes, bastaría con que prolongásemos sus líneas sobre los demás problemas colectivos para que despertáramos a nueva vida. Entonces, si hay entre nosotros coraje y genio, cabría hacer con toda pureza el nuevo ensayo español".
ResponderEliminarA este respecto, su discípulo Julián Marías escribió "Cervantes, clave española", que a mí me parece uno de los ensayos más deliciosos del siglo XX.