Festival de sonetos en la Feria del Libro
(De la presentación coram populo de Juan Lamillar)
En
1977, dos años antes de su muerte, el rostro serio de Blas de Otero, quizá ya
menos “escaldo de la corte de Moscovia”, se asomaba a la cubierta del volumen publicado
por Ediciones Turner para anunciarnos que en él se recogía toda su labor como
sonetista. Me sorprendió entonces que un poeta decidiera publicar una antología
de su obra atendiendo, no al fondo, sino a la forma, no a los temas, sino a la
métrica.
Se
trataba, evidentemente, no de publicar un libro exclusivamente de sonetos, que
tanto abundan, sino de escoger entre una obra con poemas de variada índole
métrica, los que se ajustaran a tan antigua y prestigiosa forma. Ahora, cuarenta
años más tarde, el rostro de Jon Juaristi aparece más discretamente en las páginas
interiores de este volumen y el título
de Sonetos de la patria oscura,
confeso homenaje a Gabriel Aresti y a Juan Manuel Bonet, no acaba de decidirse
a decirnos que bajo él se amparan todos los sonetos de su autor.
Los
que figuran en sus ocho libros publicados hasta la fecha, desde Diario del poeta recién cansado (1985)
hasta Renta antigua (2012), son
sesenta, aumentados ahora con ocho inéditos.
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